domingo, 20 de abril de 2014

Perro negro

Yo sé que pasan los días y me acuerdo menos de ti. Tenías razón otra vez, aunque me guste tan poco dártela: lo de borrar el número de esa persona funciona. No la olvidas, pero al menos la recuerdas menos. Algo es algo.

Ahora creo que voy a empezar algo con alguien completamente diferente. Las circunstancias no son las mejores, ni siquiera óptimas. Y no es que me volviera conformista, es que aprendí a trabajar con lo que hay, a ser feliz sin esperar correspondencia por todo lo que hago.
Creedme, me está costando horrores. Pero así tengo algo que hacer, algo con lo que estar entretenida. Un buen amigo me dijo que la pandemia del siglo XXI no iba ser ni la obesidad, ni el cáncer. La pandemia del siglo XXI es el aburrimiento. Las tecnologías avanzan, la mano de obra cada vez es menos necesario. Disminuyen las horas de trabajo necesarias para sobrevivir y aumentan las de ocio. Alguna gente no sabe qué hacer con tanto tiempo libre, y se echa a pique. Conoce a 1000 y un vicios y se pierde en ellos. Otros se ponen muy tristes, y el perro negro asola sus vidas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario